El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, denunció violaciones del derecho internacional en Gaza y pidió un alto el fuego inmediato en el Consejo de Seguridad. Esto desató una enérgica respuesta del canciller israelí y la solicitud de renuncia por parte del embajador.
Guterres condenó la “espantosa” violencia de los militantes de Hamas el 7 de octubre pero advirtió contra el “castigo colectivo” a los palestinos, sin nombrar explícitamente a Israel. Subrayó que el derecho internacional humanitario se aplica a todas las partes en un conflicto armado.
Estas declaraciones enfurecieron al ministro israelí de Asuntos Exteriores, Eli Cohen, quien acusó a Guterres de desconexión de la realidad. Cohen señaló que Israel se retiró de Gaza en 2005 y no hay disputa sobre la tierra de Gaza, aunque luego impuso un bloqueo.
El embajador de Israel ante la ONU, Gilad Erdan, pidió la renuncia de Guterres, acusándolo de comprensión por el terrorismo. El conflicto en Gaza ha cobrado la vida de numerosos civiles, con militantes de Hamas atacando objetivos civiles en Israel y represalias israelíes en Gaza.
Guterres ha solicitado un alto el fuego humanitario inmediato y ha expresado su preocupación por la crisis humanitaria en Gaza. Estados Unidos ha presentado una nueva resolución en el Consejo de Seguridad, mientras el conflicto sigue sin resolverse.
El ministro de Asuntos Exteriores de la Autoridad Palestina, Riyad al-Maliki, denunció la inacción del Consejo de Seguridad y llamó a detener las masacres perpetradas contra la población civil palestina.
El conflicto en Gaza sigue siendo una preocupación internacional, con posiciones encontradas en el Consejo de Seguridad y un llamado urgente a un alto el fuego para aliviar el sufrimiento y permitir la entrega de ayuda humanitaria.