El plan nacional de infraestructura en Perú, destinado a cerrar brechas sociales y mejorar las condiciones de vida, ha sido catalogado como un fracaso por Milton Von Hesse, director de Videnza Consultores. En sus declaraciones, cuestiona la capacidad de los funcionarios públicos y la falta de una estrategia efectiva.
El programa, iniciado en 2019, buscaba establecer una hoja de ruta para priorizar proyectos de atención poblacional, incluyendo servicios públicos esenciales como agua y energía. Sin embargo, hasta la fecha, no se han cerrado brechas. Se ha determinado un déficit presupuestal de 116 mil millones de soles en los primeros cinco años, con una proyección de alcanzar 300 mil millones de soles en 20 años, de una lista de 20 proyectos identificados como prioritarios.
Von Hesse destacó que, tras cuatro años de implementación, solo dos proyectos han avanzado significativamente, y ambos son de iniciativa privada. Señala que el crecimiento de la población peruana no ha sido adecuadamente gestionado por el gobierno, lo que ha llevado al gasto de recursos públicos sin resultados concretos.
El motivo principal de este fracaso, según Von Hesse, radica en la corrupción a todos los niveles de la gestión pública y en la contratación de personal no calificado para llevar a cabo proyectos que sufren constantes retrasos. Von Hesse enfatiza que el simple gasto de dinero no soluciona los problemas.