La ola de criminalidad que afecta al país está impactando severamente al sector comercio minorista, especialmente a los bodegueros, quienes enfrentan una doble crisis debido a la inflación y la creciente inseguridad, según informó Daniel Hermosa, vocero de la Asociación de Gremios de Micro y Pequeños Empresarios (AGREMUB).
«Muchos empresarios del sector comercio minorista se han visto en la necesidad de obtener créditos debido a que la inflación del año pasado hizo que perdieran el valor de su capital», explicó Hermosa, señalando que esta situación ha llevado a varios comerciantes a buscar financiamiento informal.
El representante gremial criticó la falta de atención de las autoridades ante esta problemática. «Lamentablemente no tenemos a la gente más idónea en el ejecutivo. Están más preocupados por el tema político, dejando de lado la grave situación que atravesamos», manifestó.
Respecto a las medidas de seguridad, Hermosa señaló que los comerciantes se han visto obligados a implementar acciones por cuenta propia. «En Lima, todas las bodegas tienen rejas, incluso doble protección, y aún así no es suficiente», destacó.
El vocero enfatizó la necesidad de un enfoque integral para combatir la delincuencia, sugiriendo mayor control sobre el alquiler de locales y la participación ciudadana en la denuncia de actividades sospechosas. «Tenemos que comenzar a tomar previsiones y controlar que los que alquilan espacios sean más agudos al momento de alquilarlas», indicó.
AGREMUB se encuentra realizando capacitaciones durante el mes de noviembre, orientadas no solo a la prevención sino también a desarrollar ideas creativas para enfrentar la situación, según informó Hermosa, quien además hizo un llamado a los bodegueros que aún no se han asociado a unirse al gremio para fortalecer el sector.