Un diagnóstico de la Defensoría del Pueblo reveló que el 100% de las 16 escuelas supervisadas en Puno no recibieron los recursos prometidos para mejoramiento de aulas. Rocío Apaza Llanos, representante de la institución, alertó que esta situación pone en riesgo las condiciones básicas de los planteles educativos.
La investigación mostró que ninguna institución educativa obtuvo las transferencias financieras para mantenimiento. Esta falta de presupuesto impide realizar reparaciones urgentes, especialmente necesarias ante la temporada de lluvias en la región.
La Defensoría del Pueblo acudió a las oficinas de la UGEL Puno para exigir la entrega inmediata de los fondos. Apaza Llanos señaló que, sin este dinero, las escuelas no pueden garantizar condiciones mínimas de seguridad para estudiantes y docentes.
El problema se agrava porque muchas infraestructuras escolares necesitan arreglos antes del inicio del año académico. La funcionaria advirtió que postergar estas intervenciones podría generar mayores daños en los locales educativos.
Apaza Llanos hizo un llamado a las autoridades para priorizar el mantenimiento escolar. Subrayó que espacios educativos adecuados son fundamentales para el aprendizaje de los estudiantes puneños.
Este caso expone fallas en la gestión de recursos educativos en Puno. La Defensoría mantendrá vigilancia para que los fondos lleguen a tiempo y se eviten riesgos en las escuelas de la región.
