Puno conmemora hoy 4 de noviembre 357 años de su fundación con una agenda llena de actividades cívicas y culturales. Desde temprano, se realizó la Misa Tedeum en la Catedral de Puno, seguida del izamiento de las banderas de la ciudad, la región y el Perú en la Plaza Mayor. El paseo de la bandera recorrió las calles céntricas, en un acto simbólico que reunió a autoridades y ciudadanos.
El alcalde Javier Ponce Roque lideró una sesión solemne en el Teatro Municipal, donde presentó los avances y proyectos de inversión para la provincia. Destacó que Puno avanza con obras en ejecución, entregas recientes y nuevas iniciativas que buscan mejorar la calidad de vida de sus habitantes. El burgomaestre resaltó el esfuerzo de los puneños en la construcción de su identidad, subrayando que el aniversario es un reconocimiento a su trabajo y dedicación de la población.
La jornada incluyó un homenaje a la Virgen de la Candelaria en el templo San Juan, donde autoridades y fieles rindieron pleitesía a la patrona espiritual de la ciudad. La sesión solemne contó con la presencia de regidores, congresistas y representantes de otras regiones, quienes acompañaron las celebraciones.
Anoche, Puno vibró con una serenata musical en la plataforma multiusos de la Ciudad Lacustre, donde participaron agrupaciones y artistas de renombre nacional y local. El grupo Antología fue uno de los protagonistas, en un espectáculo que resaltó el folclore y la tradición musical de la capital del folclore peruano.
El alcalde Ponce Roque recordó que Puno es una ciudad de esfuerzo y cultura, donde cada aniversario refuerza el compromiso con su desarrollo. Los proyectos anunciados incluyen mejoras en infraestructura, educación y turismo, sectores clave para el crecimiento de la provincia.
Las celebraciones continuaron con actividades que unieron a la comunidad, desde actos protocolares hasta expresiones artísticas. Puno reafirmó su lugar como un referente cultural y turístico del país, atrayendo la atención de visitantes y autoridades de todo el Perú.
La población puneña celebró con orgullo sus 357 años, recordando su historia y mirando hacia el futuro con esperanza. Las autoridades prometieron seguir trabajando por una ciudad más próspera y unida, donde la identidad y el progreso vayan de la mano.


