En la zona limítrofe de Puno y Moquegua, específicamente en la parte alta del distrito de Acora (Puno), se tiene un aproximado de 10 centros educativos, que este lunes dieron inicio al año escolar 2024, en medio de infraestructuras deterioradas y vías de comunicación intransitables que ponen en peligro a los docentes y estudiantes.
El alcalde del centro poblado de Aguas Calientes, Juan Mendoza, indicó que el inicio de clases en la zona rural es muy diferente al que se muestra en la zona urbana, pues no todos los alumnos asisten desde el primer día de clases por diferentes motivos, siendo uno de los principales, el deficiente estado de las carreteras.
“Los ríos han incrementado su caudal y muchas vías han quedado intransitables, ello pone en peligro a los estudiantes, porque muchos tienen que caminar para llegar a sus escuelas”, dijo a través de Pachamama radio.
Por su parte, el alcalde del centro poblado de Jilatamarca, precisó que una de las principales preocupaciones que se tiene en esta jurisdicción es el deficiente estado de los locales educativos, por lo que hizo un llamado a las autoridades del sector.
