Vecinos de la urbanización Santiago Ríos, en la provincia de San Román, se enfrentan al aumento de robos y asaltos tomando medidas por cuenta propia. En respuesta a la ineficiencia de las autoridades, decidieron adquirir 10 sirenas de alarma y las instalaron en diferentes puntos estratégicos de la urbanización.
Ángel Coanqui Pacori, presidente de la urbanización, explicó que los vecinos contribuyeron económicamente para comprar las alarmas y también llevarán a cabo simulacros frecuentes para estar preparados ante posibles actos delictivos en la zona. Su objetivo es prevenir cualquier delito antes de que ocurra, ya que la presencia policial y de serenazgo es insuficiente.
El dirigente expresó su preocupación por la ausencia de seguridad en el barrio y resaltó la importancia de protegerse. Aunque hasta el momento no han ocurrido robos en la zona, no quieren esperar a ser víctimas y han decidido tomar la iniciativa con la instalación de las alarmas. Cuando se produzca cualquier incidente, todas las sirenas sonarán al mismo tiempo para alertar a los residentes.
Por último, el dirigente lanzó una advertencia a los delincuentes, indicando que serán capturados y enfrentarán la furia de la comunidad. Debido a la falta de confianza en la policía y en las autoridades judiciales, los vecinos están dispuestos a tomar medidas drásticas para protegerse y garantizar la seguridad en su barrio.
