Yovana Cruz Solano, madre de familia, denunció hace 8 meses una negligente intervención y agresiones por parte de efectivos policiales en la comunidad de Cochaquínray, distrito de Cabanilla, provincia de Lampa, el pasado 12 de enero de 2024. La mujer, quien se encontraba en estado de gestación, fue arrastrada y golpeada durante una intervención policial, lo que resultó en la trágica pérdida de su bebé de 4 semanas, hecho que fue denunciado y al momento solo se tiene impunidad y blindaje de la institución.
Entre lágrimas, Cruz Solano exigió justicia y una sanción ejemplar contra los policías involucrados. Según su testimonio, pese a informar sobre su embarazo, fue sometida a maltrato físico y psicológico. La intervención policial ha sido cuestionada por su irregularidad, ya que se basó en una denuncia por agresión ocurrida 24 horas antes, sin existir flagrancia delictiva.
La afectada denunció que su caso, inicialmente investigado por fiscales de derechos humanos, fue injustamente derivado a la fiscalía penal de Lampa. Asimismo, expresó su frustración ante la falta de acción por parte de la Inspectoría de la Policía Nacional del Perú, que aún no ha iniciado una investigación formal contra los efectivos implicados.
Cruz Solano identificó a los presuntos responsables: SO1 Yanqui Calla Yolanda, SO2 Álvarez Mayta Bruno Jhoel, SO3 Chilligua Huancco John Dayvis, SO3 Zeballos Landa Freddy Alberto, SO3 Condori Pachauri Abraham Valdelomar y el Mayor PNP Vargas Rivera Luis Alberto. Se les acusa de abuso de autoridad, denegación o deficiencia al apoyo policial y aborto preterintencional, mientras la víctima clama por justicia para ella y su hijo no nacido.
